martes, 21 de septiembre de 2010

Amsterdam... Amsterdam...

Todavia no he escrito sobre el lugar donde estoy actualmente viviendo, Esslingen, ni de su vecina mayor Stuttgart, pero ya tendre tiempo. Por ahora quiero relatar mis impresiones sobre una ciudad que, ya adelantando mi conclusion, es INCREIBLE.

Viernes 3 de la tarde, sale desde Stuttgart un avion que entre otras personas, llevaba un multinacional grupo de jovenes: Finlandia, Mexico, USA, y Argentina x 2 conformaban el equipo de 5 que decidió dedicar un fin de semana largo a Amsterdam. Para las 6 pm. ya habiamos dejado las cosas en el hostel, cuya cocina, comedor, baño y duchas, eran la misma cosa. Indescriptible. Y por supuesto, estando en Amsterdam podés ir a museos, recorrer los canales, ver sitios historicos, pero todo el mundo sabe lo que hace famosa a esta ciudad, los Coffeeshops y el "red light district" ni mas ni menos que la zona roja. Y alla fuimos, primer coffeeshop que encontramos nos metimos a pasarla lindo, y de ahi a recorrer la zona roja que para mi sorpresa es mas grande de lo que esperaba. Muchos sabrán de que se trata, yo mismo habia visto fotos y habia escuchado relatos de este barrio, pero estar ahi lo cambia todo. Las minas estan ahi! en la vidriera! por cuadras y cuadras!... pfff si no te controlas en Amsterdam, se te va la vida, y ni hablar del sueldo. No es una ciudad barata, y si queres pasarla lindo, tenes muchas opciones para vaciar tus bolcillos: bares, coffeeshops, shows de sexo, smartshops, prostitutas...

Y asi pasaron el viernes y el sabado, dedicados a los vanales placeres de la vida. Voy a aclarar que no hice uso de los servicios de las trabajadoras de la zona, que por mucho merito que hicieran invitandote a pasar, su presupuesto sobrepasaba un poco mi disponibilidad monetaria.. El sabado temprano hicimos un tour guiado con Nahuel, el otro argentino del grupo,  por la ciudad, en el cual nos hicimos amigos de dos españoles que habian ido en el mismo plan que nosotros, asique sumamos una quinta nación al grupo. Muy copados los pibes, pero se iban temprano al hotel porque les quedaba lejos del centro y tenian un horario para tomar el bus que los llevaba.

El domingo fue mas tranquilo, coffeeshop temprano, mas tarde museos y luego el clima no acompañaba asique los chicos se fueron a dormir temprano. Y yo me dedique un poco mas a la cerveza en un par de bares cerca del hostel. Ya el lunes fue visitar el museo historico, caminar un poco mas la ciudad y pegar la vuelta a la nochecita.

En deinitiva, Amsterdam me encantó, con sus canales, su historia, su vida nocturna.. tiene mucha personalidad, muchas cosas propias de ahí. Tengo que volver, y volver con un vagón de plata para gastar sin preocuparse porque, a saber, si vas a Amsterdam, vas a gastar mucha plata.

Finalmente, dos imagenes me quedaron en la cabeza y no creo q me las olvide. La primera, en plena zona roja, con cientos de personas caminando por esas callecitas y callejones, el murmullo, las risas, los borrachos de fiesta, las luces rojas, y una puerta que se abre, rechinando, para que el cliente se asome. La segunda, saliendo de la zona de bares, un tipo tambaleandose un poco va caminando y cantanto una cancion de cuya letra capté muy poco, pero cuya melodia llevaba un dejo de melancolia y felicidad... como quien sabe que esa ciudad lo mata, pero no podia dejarla... el tipo cantaba una cancion y el estribillo era solo un nombre

amsterdaaaaaam... amsterdam....

No hay comentarios:

Publicar un comentario